La
gran noticia ha saltado, España contará con un corredor por el mediterráneo donde
los trenes al igual que los de juguete se meterán por el entresijo de nuestras
vidas para poner en contacto a los vecinos del rellano.
Las grandes empresas de la construcción deben
estar frotándose las manos, las maquinas de amasar dinero se habrán puesto en
marcha y las apisonadoras allanaran el camino sabiendo que los intereses
particulares no tendrán un resquicio para defenderse; todo planificado con la
excusa de lanzar un salvavidas a esta España de desahuciados condenados a la
miseria por la especulación inmobiliaria para meterlos en un desastre mucho
mayor.
Se
nos vende la idea igual que se nos vendió la entrada en el mercado común donde
todo eran ventajas que nos situarían por fin en la Europa del bienestar y del
confort donde el menos favorecido veranaba en nuestras costas y el más
afortunado se permitía hacerlo en el Caribe.
¿No
hay ningún político que nos diga que más que un corredor seremos un pasillo por
el que transcurrirán los trenes que cargarán los productos traídos del norte de
África para situarlos en centro Europa en tiempo récord haciendo la competencia
a los productos Españoles? ¿Nadie calibra el alcance que supone que miles de
hectáreas del continente norte africano, esté en las mismas manos que hasta
ahora nos vendían el petróleo y que ahora experimentan con la agricultura?
¿Somos tan necios de hacerles un pasillo por el que transiten sus productos
sacrificando nuestra producción y nuestro suelo? ¿Qué será de los productos
españoles cuando pasen a depender de los transgénicos de estas mismas
multinacionales?
La
barbaridad de que España exportará más coches hacia Europa por el ahorro de 200
euros en el transporte de cada vehículo como ha dicho un alto cargo del
sector es querer hacernos comulgar con
ruedas de molino. ¿Acaso los trenes no son de ida y vuelta? ¿Quién competirá
con los productos manufacturados en
centro Europa y la Europa del este? ¿A cuántos españolitos de a pié beneficia
este corredor tan celebrado?
La
España de las quiebras y los desahucios está dando paso al nacimiento de un
nuevo ciclo mucho más dañino, el de los alimentos básicos importados sujetos a
una especulación mucho mas destructora y despiadada que la anterior donde el
campo condicionado ya por abonos de laboratorio sufrirá desconocidas
transformaciones al servicio de intereses meramente especulativos que harán
imposible cosechar productos básicos sin autorización de los trust implicados
en su manipulación.
España
se convertirá en la senda de los elefantes donde Europa vendrá a tomar el sol
con visitas programadas para observar aborígenes perdidos entre riscos
imposibles empeñados en seguir viviendo
de cultivos naturales.
LAS AUTOPISTAS PERMITIERON VIAJAR MAS RAPIDO PERO
MATARON LA VIDA DE LOS PUEBLOS DEL CAMINO.
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