NO ME PONGA USTED EL LAZO AMARILLO

Pus no señor yo no quiero ponerme el lazo amarillo, ni quiero que ocupen los balcones y fachadas de edificios oficiales, todo lo mas que ocupen la mitad, el resto nos pertenece a los que no queremos ponérnoslos, respeto el criterio del que quiera lucir en su solapa tantos lazos como quiera de la misma manera que yo puedo lucir sobre mi persona cualquier signo de identidad.

Pero otra forma de imponer es excluir, si mi vecino no me habla porque no me pongo el lazo me la trae al pairo, pero si en una asamblea no me dejan hablar porque no porto el lazo amarillo ya no es lo mismo, si el presidente de la generalidad manifiesta abiertamente que solo gobierna para los independentistas yo quiero que otro presidente nos gobierne a los no independentistas, medio balcón para cada uno y que cada cual mande por su cuenta, o de lo contrario partamos Barcelona por la mitad, el paseo de gracia sería la frontera natural, el fielato lo pondríamos en la calle Aragón, habría canje de pisos para los que quisieran pasarse a la otra zona, la Generalidad se establecería en el Tibidabo como punto equidistante a las dos demarcaciones y en el metro y autobús había vagones independientes con lazo o sin lazo, los hasta ahora barrios de Horta, Gracia, Sarria, San Gervasio, y otros podrán también pedir su independencia y si a su vez no se pusieran de acuerdo con los lazos serian divididos en bloques para facilitar una mejor convivencia.

Todo esto me viene a la cabeza cuando leo las manifestaciones del Sr.Tardá (Portavoz de E.R.C.) y su agria polémica en Twitter donde manifiesta abiertamente que es imposible imponer la independencia cuando el cincuenta por ciento de la población no está de acuerdo, parece que al menos alguien se da cuenta de que el problema no está en Madrid, ni en los jueces, ni en los presos, ni en los partidos, el problema es una ciudadanía cada vez más dividida, cada vez más radical  y cada vez mas harta de sentirse vapuleada por unos y por otros, temerosa a la vez de que los últimos enfrentamientos no sean más que el inicio de tumultos mas incontrolables.

               LOS LAZOS NUNCA SE HICIERON PARA SEPARAR