AVENTANDO LA PARVA

Aventando la parva se anda estos días en el martirologio de la política, nos quieren meter la brizna en el ojo para ocultarnos otras paneras y a fe que lo consiguen, pues no hay noticiero ni esparcidor de noticias que no ponga el cartel de la corrupción en  cabecera ni misal de salmos separatistas y cantorales de unificación en el atril de la pantalla. Suena mal esta misa cantada a siete voces sin batuta visible y varios concertinos buscando afinación intentando dar con la nota exacta enmascarando destemplanzas  de solistas sin oficio y de motetes por afición.

Recuerdo que aventar la parva requería mas destreza que fuerza y manejar el bieldo no era cuestión de energía si no de aprovechar   el cierzo para lanzar al aire la mies recién trillada haciendo volar la paja separándola así del grano que por su propio peso quedaba limpio a los pies del aventador, lo malo es que el vecino que sufría la ventolera se daba a todos los diablos al ver tapada su parva  que por muchos gritos que diera no había manera de hacerse respetar en la era.

Estos días se está aventando el escándalo de la corrupción en Cataluña para poner sordina al coro del separatismo, el compas parece muy medido y la partitura exquisitamente pautada; el protagonista de este acontecimiento que aparece como el gran villano está magistralmente conseguido, el resto del libreto cuajado también de primeras figuras componen una obra que en su conjunto quedará marcada  como transcendental para la historia, pero entre los críticos hay disparidad de criterios y no lo es menos el pensar que la familia protagonista de esta ópera será tratada al final como víctima propiciatoria al servicio de España pues no hay duda que sin su concurso el giro de esta separata rodada en Cataluña hubiera sido completamente distinto y son tantas las parvas que aventar y las partituras que interpretar que el barrunto de tormenta que puede pillarnos a todos con la parva en la era.

AL  BARRUNTO DE TORMENTA COGE  ANGÜARINA Y DEJA LA CUENTA