A BOTEPRONTO

Le ha faltado tiempo al amigo Mas para empezar a meternos el ombligo para dentro, el anuncio de que nos sube los servicios básicos y que va a poner peaje a las recetas sanitarias nos ha pillado tan de sopetón como al boxeador grogui que no sabe por dónde le arrearon. No esperaba CIU este resultado en las últimas elecciones en Cataluña después de  las manifestaciones que los funcionarios de sanidad y educación montaron en las principales vías urbanas  y centros de trabajo poco antes de los comicios,  ahora al tener todos los ases de la baraja política catalana en la mano se sienten respaldados por la ciudadanía e incuestionables en sus decisiones.

Las elecciones en Cataluña tienen varias lecturas y esta ha sido otra  manifestación; el ciudadano no se siente identificado con los problemas de sus funcionarios a los que siempre ha visto como una casta superior indolente y altanera  con horarios incontrolados y nominas seguras para toda la vida mientras él, su propio jefe y cliente al fin y al cabo ha sido tratado en muchos casos como objeto abandonado en consigna de estación de tercera. Los profesionales de la medicina sobre todo no han sabido o no han querido cambiar esta imagen, nadie parecía capacitado para  moverles la silla y a nadie parecía importarles si el paciente al cual se debían merecía un trato más humano o más personalizado y ahora cuando la situación es la de café para todos no entienden que su clientela no acuda a sacar el Cristo a pasear.

Por otra parte con lo del bufet libre de la medicina se están cometiendo  excesos inasumibles, no hay domicilio particular donde el botiquín de medicamentos innecesarios no suponga  miles de euros para las arcas públicas, ni le damos valor a las horas perdidas por no acudir a las citas programadas con antelación o acudir a urgencias por un grano emberronado con la excusa de que lo que no se paga no cuesta.

Todo esto quiere arreglarlo Mas, en la primera tacada nos sube el precio del agua, los transportes, la gasolina rebaja los sueldos y a los pensionistas nos deja temblado sin saber si los quebrantos de la olla de D. Quijote serán plato de fiesta en nuestra casa de ahora en adelante.

 No es bueno tanto poder en tan pocas manos pero el resultado de las últimas elecciones puede tener una  virtud, ver hasta dónde son capaces de cambiar el rumbo político y social de Cataluña sin tener que contar ni echar la culpa a otros partidos ni formaciones políticas por no conseguirlo, culpar al gobierno de Madrid pierde toda su fuerza.

Ahora queda por determinar la postura de las farmacéuticas radicadas en Cataluña y la presión que puedan ejercer sobre este gobierno cuando en sus balances queden reflejados los rendimientos contables y sus intereses choquen abiertamente con los de la comunidad.

 Una campaña para una sanidad paralela no tardará en aparecer,  auspiciada por intereses particulares e influenciando el descrédito de la sanidad pública y su recurrente falta de medios tendremos vales para canjear en clínicas particulares a cuenta de la S.S. para operaciones concretas  evitando listas de espera,  demoras innecesarias, y un coste menor para el erario público. ¿Nos apostamos algo?

 Las subidas de otros servicios como el agua y el transporte repercutirán directamente en nuestros bolsillos pero incidirán también en el encarecimiento  del sector servicios  y será el chocolate del loro; comida para hoy y hambre para mañana. ¿Y después qué?

CUANDO LAS BARBAS DEL VECINO VEAS PELAR...