PASARSE DE FRENADA

El amigo Mas se ha pasado de frenada o ha hecho una salida en falso, su reciente  comparecencia ante los medios de comunicación está pesando demasiado en esta Cataluña que si no está a gusto de cómo marchan las cosas tampoco está a gusto con ciertos gestos de altivez y suficiencia. Cuando nuestro presidente habla en nombre de todos los Catalanes es como si solo fueran Catalanes los que salieron a la calle el pasado día once, cuando la realidad es que la mayoría de los que vivimos en esta tierra estábamos en otras ocupaciones y no porque no nos sintiéramos identificados con lo que representa esa fecha para Cataluña si no porque se estaba  utilizando la Diada de forma sesgada y totalmente contraria a lo que realmente representa.

Cuando nuestro presidente se dirigía en Ave a la capital del reino  Cataluña viajaba en su maleta un tanto expectante por los objetivos a conseguir y no menos preocupada por las posibles reacciones que la entrevista pudiera acarrearnos  en el resto de España, la intervención del Rey tampoco serenó mucho los ánimos y así las cosas todos quisimos saber que pasó después del apretón de manos en la puerta de la Moncloa.

La explicación del Sr. Mas y la imagen de su escenario no ha podido ser más desafortunada, la “embajada” de Cataluña en Madrid sin bandera Nacional y discurso en Catalán parecía vender la imagen de que aquí todo el mundo es separatista incluyéndonos a todos los que aquí vivimos sin distinción y sin tener en cuenta que  ese resto de España es la que nos parió y donde está parte de nuestra familia a la que no renunciaremos por nada del mundo.

Ahora nuestro presidente regresará a Barcelona para contarnos su entrevista con el Señor Rajoy, seguro que lo hará entre banderas esteladas  y convocatoria de elecciones pero sea lo que sea su maleta de retorno habrá  dejado tras de sí una estela agridulce fácilmente evitable y por otra parte nada positiva para su próxima campaña. El resto de España que se diga lo que se diga respeta los valores del  pueblo catalán ha recibido una imagen de suficiencia y arrogancia que debería haberse evitado arrastrándonos a todos a levantar la voz para explicar que  ya se hizo un sondeo en Cataluña a pié de calle donde un veinte por ciento más o menos se manifestó abiertamente por la independencia pero donde nadie pareció valorar la opinión del ochenta por ciento restante.

MAS YA TIENE SU ESCUSA EL PUEBLO CATALAN TENDRÁ LA PALABRA

Nota: Recomiendo releer mi escrito: Reflexiones después del 11 de septiembre.