UNA VISITA IMPOSIBLE

Hoy he pasado por el domicilio que la familia Ulises en el barrio de Gracia para felicitarles las navidades pero no los he encontrado en casa, he podido ver su balcón adornado de luces de navidad y a D. Melitón escalando por la fachada vestido de Papá Noel, según me han dicho económicamente llegan muy justitos a final de mes la pensión de D. Ulises Higueruelo no da para mucho y aunque Dª Sinforosa hace milagros no siempre llegan con holgura a todos los compromisos, su hija Lolín se casó al fin con un funcionario pero las cosas no marcharon bien y ahora están tramitando su separación,  menos mal que como a fuerza de escoger a Lolín “se le pasó el arroz” y al no haber hijos por medio facilita las cosas, Merceditas y Policarpito ya muy creciditos preparan oposiciones  mientras  esperan en la cola del paro pero están barajando la posibilidad de marchar para Inglaterra donde encontrar trabajo parece más fácil, la abuela Filomena se escoñó una cadera pero ahí sigue erre que erre dando caña al pobre del Sr. Ulises que torea como puede la situación y acude en busca de consuelo a casa de sus amigos sobre todo a la de D. Paco para aliviar la situación, el perito Treski murió ya de viejo no sin dejar antes cumplida descendencia que regalaron a los vecinos más queridos de Dª Filomena que además por ser del barrio parecen haber colonizado la zona a base de sucesivas camadas.

Hoy quería haberles preguntado si por fin consiguieron matar aquél pavo que les trajeron del pueblo o pudieron encontrar al pordiosero oficial del barrio para sentarlo en su mesa navideña o que fue de Carpanta y su puesto de trabajo en el asador de pollos de la barriada o si por fin se pudieron librar de aquella cesta de navidad que ellos enviaron al director del banco repleta de jamones y buenas bebidas y les llegó  después de pasar por tres o cuatro manos como obsequio de una “visita de cumplido” pero sin jamones y rellena con cuatro chucherías compradas en un todo a cien.

Todo esto quería haberle preguntado a la familia Ulises Higueruelo, pero no los he encontrado en casa, parece que andaban ultimando algunos detalles para la mesa de Navidad y sobre todo ya me advirtieron que no les pregunte por  Fernandino el antiguo amigo de su hija por que han roto definitivamente sus relaciones ya  que este se declaró furibundo independentista y ahí sí que el Sr. Ulises se mostró intransigente y acérrimo defensor de la unidad de España y como ni uno ni otro quisieron bajarse del burro Dª Sinforosa y Dª Filomena  hicieron causa común cortando por lo sano y decidieron retirarle el saludo  antes de que malmetiera a Merceditas o a Policarpito. Me hubiera gustado charlar sobre los cambios habidos en España y la situación económica y social de Cataluña en especial pero esta vez he tenido que limitarme a dejarles una tarjetita por debajo de la puerta felicitándoles las Navidades y desenado prosperidad y suerte para el próximo año y recordarles que espero noticias suyas en el quiosco de la esquina y sobre todo que me cuenten su último contratiempo con ese billete de lotería que metieron en la lavadora dentro el bolsillo de la camisa y no ven manera de justificarlo ante la administración.

EL KIOSCO ERA LA CAJA DE LA ILUSIÓN, ABRIRLA ERA DEGUSTAR LAS         SENSACIONES.

                 FELIZ NAVIDAD