CRISIS DE IDENTIDAD

Metido como estoy en tantos charcos y adoptado últimamente por el grupo de poetas del que les hablé en mi artículo anterior he decidido confeccionar mi tarjeta de presentación para evitar así que en los  actos de cara al público ante mi evidente falta de títulos alguien pueda sentirse defraudado o lo que es peor que el presentador del acto trate de venderme por lo que no soy o quiera que sea lo que no he sido, mi dilema es que según quien escucha soy “de los otros” porque en mis trabajos predomina el ambiente rural y sobre todo empleo el charruno en muchos de mis escritos dándose la paradoja que después de tantos años fuera de Salamanca tengo que explicar y defender una comunidad que no existía cuando la dejé y lo más significativo es tener que justificar a sus políticos en cosas con las que aun no estando de acuerdo incumben a la comunidad  catalana, difícil equilibrio cuando mis hijos y mis nietas nacieron aquí y cuando posiblemente el balance con mi comunidad de nacimiento sea más bien neutro salvando eso si el cariño de la familia con la que mantengo comunicación constante y visito con frecuencia.  También se da el caso contrario cuando leo en la prensa Salmantina noticias que se refieren a Cataluña de forma peyorativa y muchas veces sesgada y fuera   de la realidad,  entonces me pregunto quienes son para esos políticos o periodistas “Los catalanes” a los que se refieren o si no se nos considera catalanes a los que vivimos aquí por el solo hecho de hacerlo o solo son catalanes los nacidos a este lado del Ebro y los demás somos unos renegados que se vendieron al enemigo; difícil dilema el mío cuando emparedado entre dos realidades solo puedo gritar a través de mis versos como el naufrago que nada entre dos orillas y de ninguna le llega el cabo salvador que lo arrastre hacia su costa.

SOY POETA DE BARBECHO

Dicen que tiendo a poeta

De barbecho digo yo

Escribidor de mil  versos

De surcos  con azadón

Soy… binador de mi  tierra

Con mancera por timón

Entre jarales de brezo

Y por besana un balcón

Soy juglar entre terrones

Sin rebaño soy pastor

Soy rezongón y pendejo

El refrán es mi oración

Y cual barruntan ustedes

Changarreo…  soy mayor

Por Salamanca y sus dejes

Yo me siento trovador

Si  no aventé hoy sus males

Y en ello empeñé mi voz

No se amohínen conmigo

Solo soy un soñador.                                

                                  

                                     J. Hernández