domingo, 1 de marzo de 2015

LA VENTAJA DE NO CUMPLIR AÑOS

Esto de nacer un veintinueve de Febrero tiene la ventaja de cumplir los años cuando te apetezca o no cumplirlos si en ello tuvieras capricho lo malo es que luego te caen de cuatro en cuatro o posiblemente tengan que decir que moriste intentando llegar a los diez y nueve lo cual dejaría tras de sí una sensación de precocidad de la que no soy merecedor.

Yo siempre fui raro o mejor dicho sigo siendo raro porque lo fui hasta para nacer y desde entonces he ido por la vida como a contra corriente sin acomodo de normas ni conformismos y esto créanme me ha dado algún problema pero también satisfacciones pues no siendo esta una postura cómoda he procurado siempre comportarme con honestidad lo que me ha proporcionado algún reconocimiento pero  también algún capón, otra ventaja a estas alturas de la vida es que puedes expresarte como te de la gana porque difícilmente podrán tomar represalias contra un viejo  descanyado y cascarrabias a un paso de la senectud que no hace más que decir tonterías porque la vida te aboca a unos vaivenes impensables, yo precisamente que me prometí a mi mismo que no saldría nunca de “mi” Salamanca de la que conocía cada rincón y a cada personaje; aquí me tienen confundido entre los pliegues del Parque Güell  y la sierra de Collserola, yo que acompañando a las empingorotados viajante de tejidos que llegaban de Sabadell les escuchaba hablar en un idioma raro del que me dije no querer saber nada acudo ahora a clases de catalán, yo que llegar hasta Zamora me parecía toda una aventura y llamaba renegados a los que salían de la tierra en busca de futuro, estoy ahora viviendo al otro lado del mapa aunque mi futuro se conjuga en presente,  yo que me prometí a mi mismo  regresar a la primera oportunidad me veo ahora aguantando como el último Mohicano defendiendo mi origen y de mis orígenes lo cual es suficientemente ilustrativo; total que  mi vida yo diría tiene un balance un tanto inconcreto, inconformista y trasgresor.

De todos modos hay una supremacía que dan los años y es la de contar tu vida, las batallitas del abuelo  son una constante entre los que me rodean mis hijos huyen de mi; mis nietas me aguantan hasta que me pongo repetitivo; los amigos se excusan cuando me ven y los conocidos por falta de confianza aguantan estoicamente sin levantar una ceja, pero quien me conoce bien sabe que siempre tengo una batalla por comenzar una idea que seguir o un proyecto que iniciar y en este tejer y destejer siempre quedará un poquito de mi; un trocito de la ilusión de un principiante y la experiencia de un viejo rezongón que no se conforma con estar, el conjunto de todo ello conforma la figura de este abuelo que hoy no había nacido  y mañana tendrá un día de vida.


LA VIDA ES UNA CINTA  RODANTE EN LA QUE PUEDES IR VACIO O CARGADO DE EQUIPAJE

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tiene a su disposición este espacio para sus comentarios y opiniones. Sea respetuoso con los demás

Este soy yo

Hace ya muchos años que las circunstancias me hicieron dejar Salamanca por motivos profesionales, instalándome en Barcelona. Añoro mis raíces y cuando vuelvo pueden encontrarme paseando solitario a primera hora de la mañana por las calles que tanta cultura han acogido. Salamanca sigue presente en mí.
Siempre he sentido la necesidad de comunicar mis sentimientos, por si lo que a mí me parece interesante a alguien le pareciera útil.
Joaquín Hernández
Salamanca/Barcelona