Las trompetas de Josué estaban desafinadas, mucho impló el
pecho el trompetero oficial que había de derribar el Jericó monclovita, mucho
hinchó el papo pero no reparó en que tenía taponada la tuba y el resoplido
lejos de salir para adelante le salió por el mismísimo culo, no parecía difícil
hacer comprender al pueblo que los cimientos de la fortaleza a derribar estaban
tan desgastados por la corrupción que
con un resoplido mas bastaba para hacer
caer el baluarte, pero cuando el trombón se carga de arrogancia las notas se
salen de partitura y la llamada se convierte en un toque a zafarrancho general con
el que el pueblo sale en desbandada sin más alternativa que salvar lo poco que
tiene aunque para ello tenga que pasar por el fielato de la corrupción.
El partido socialista se ha estrellado con la muralla del
Jericó monclovita cuando la ruina
parecía eminente, a los defensores del
baluarte les ha bastado con aguantar taponando grietas estivando los sacos
terreros que se dejaban por el camino los sitiadores y así como decían en mi
pueblo no hay carro que circule ni mula que no bascule y parón de arriero saca
del culo para el puchero.
Cuando el caso la Gürtel y las tarjetas Black y el
despropósito de de la salida de Bankia a bolsa están poniendo patas arriba al
partido del actual gobierno en funciones es impensable que pueda seguir
gobernando sin ni siquiera sonrojarse, pero
lo más increíble es que esta España nuestra
pueda con todo y haciendo mangas y
capirotes tire para adelante cuando las cuadernas del barco nacional crujen en
medio de la tormenta y el palo mayor se ha venido abajo. Mantener este barco a
flote sin que se amotine la marinería es todo un ejemplo de sentido común y aunque algunos podríamos ser rescatados por una
barcaza llamada Cataluña vemos que las cosas en ella no están mejor, la Banca
Catalana, el caso del Palau, el contubernio del clan Puyol, el desmoronamiento de C.I.U. y el
empecinamiento en gobernar contra corriente lastran y ponen en duda cualquier credibilidad
de llegar a puertos más seguros, la cabezonería
del timonel no hace presagiar nada bueno y la bandera de conveniencia que ondea
en el palo mayor no parece suficiente
para encontrar abrigo en dársenas más propicias.
Todos estos mangantes se están cargando el esfuerzo con el que
nuestra generación consiguió salir del pozo del subdesarrollo, despanzurrada además
la hucha de nuestras pensiones la situación
es cuando menos de intranquilidad, el derecho al pataleo no es suficiente
cuando los comedores sociales proliferan en cada barrio, en los colegios se
detectan niños con síntomas de desnutrición, el nivel de pobreza está llegando
al veinticinco por ciento de la población y el desarraigo y la soledad avientan
a las puertas de muchos ancianos sin que nadie disponga los medios suficientes restablecer
su dignidad, volvemos a los tiempos franquistas del Auxilio Social y las colas
para el litro de leche de Caritas o la cuota de queso americano en los colegios
a cambio de bases militares, mientras tanto España se vende a trozos pero a las
primeras de cambio reclamamos el peñón de Gibraltar.
Franco...Franco...Franco...
AL DIVIESO DE LA
CORUPCIÓN EN ESPAÑA SE LE LLAMA PORÚNCULO
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tiene a su disposición este espacio para sus comentarios y opiniones. Sea respetuoso con los demás