EL ENQUISTAMIENTO POLITICO O LA AMBIGÜEDAD PLANIFICADA

Esperar que se resuelva por si solo el enquistamiento de la política catalana no parece la mejor solución, el trombo sigue estando ahí y no es bueno andar jugando con las arterias de esta España en nombre de la independencia, pero tampoco es recomendable dejar en manos de la heparina ocasional el tratamiento a seguir.

La contumacia de los independentistas estalla con sus alocadas puestas en escena y sobre todo declaraciones tan impropias como las formuladas por el antes juez y ahora proselitista y yo diría que dinamitador Santiago Vidal, presumir de no acatar y trasgredir  la ley es bajar la barrera de la indisciplina a nivel de suelo,  pretender con estas premisas que el 30% de los catalanes imponga su ley a la mayoría tampoco parece lo más probable, preguntar por las ventajas y beneficios es topar con un frontón sin pared lateral, nadie te explica, nadie concreta, solo la intención de desligarse de España aparece como único anhelo y solo con eso y una bandera no convencen ni tampoco consiguen más adeptos.

Las fechas que se avecinan marcarán un antes y un después, las encuestas a favor del sí no aparecen como ganadoras, la puesta en marcha del referéndum con las urnas como emblema son la excusa del victimismo para demostrar la intransigencia y el acoso del gobierno de España contra una nación oprimida llamada Cataluña, mientras el gobierno central hace oídos sordos, mira para otro lado y olvida que en este trozo de España se vive con incertidumbre un devenir político y no deja de inquietarnos la posibilidad de un enquistamiento sin diagnostico claro ni tratamiento a seguir.

Ada Colau desde el ayuntamiento sigue manteniendo la ambigüedad como lema, al tiempo que horada el camino que la llevaría al otro lado de la plaza de San Jaime y con ella la clase trabajadora que no se identifica con los actuales mandatarios de la Generalidad catalana, que a falta de un líder nato  parecen timonear el barco por turnos de conveniencia. La hasta ahora  regidora de la capital mira el futuro de Cataluña con un catalejo mas artesano donde punto de referencia queda marcado con el añil de la paciencia y el azul de la constancia, ella manda  deja hacer y ordena su casa poniendo todo en orden pero procurando  también que el polvo de la vecina no se le cuele por las ventanas, Ada es mucha Ada y si un día logra asomarse al balcón que está al otro lado de la plaza de San Jaime, Cataluña habrá cambiado y España quiéralo o no tendrá que enfrentarse a una Agustina de Aragón que  en su arenga  arrastrará a la clase trabajadora que ahora permanece impasible al no identificarse con el oligopolio que nos gobierna, la matrioshka catalana encierra muchas Colau jugar con ella no parece fácil pero convencerla es tarea imposible.

LA URNA DE LA ABSTENCIÓN ES LA SUMA DEL VACIO DE LAS DEMÁS