Pedro Cordero es una roca, no hay marea que le tumbe ni tsunami que lo amedrante, hacia meses que no nos veíamos, como siempre su tarjeta de presentación es su sonrisa, el pelo crespo, espeso y canoso, ojillos avispados y unas ganas infinitas de vivir arropan un cuerpo cincelado por dentro, la mascarilla no fue barrera para fundirnos con un abrazo que debió ser de amigos pero también de júbilo al volvernos a encontrar después de esta maldita pandemia. Sigue con las ideas escritas en mármol, no altera una silaba y tan personal en sus conceptos que no puedes dejar de escucharlo, admitiendo tu ignorancia puede casar pasajes de la historia casi olvidados que demuestran que el presente político ya estaba escrito y vaticinado por los próceres de la otra España. No hay duda de que es un hombre de izquierdas, haber nacido en la provincia de Palencia le hace sentir muy a su pesar que nuestra comunidad no es precisamente progresista ni emprendedora, para afirmarlo deshoja datos fechas y connotaciones tan precisas que difícilmente dan margen para la réplica.
Hoy he querido sorprender a mi amigo, al encuentro he llevado
bajo el brazo uno de mis cuadros, es un pueblo vacio, falto de vida,
achicharrado por un sol de justicia donde solo la casona de piedra del cacique se
resguarda del solano, la hiedra comienza a lamer las fachadas, un tendido
eléctrico en precario aguanta débiles comunicaciones con el exterior, la torre
de la iglesia preside del conjunto como testigo de un pasado de oligarquías ya
caduco que ni siquiera la cigüeña trata de colonizar. Hoy nos hemos encontrado
en una plaza pública acotada, donde un grupo de compañeros y el mismo han
convocado a los vecinos para hablarles sobre las pensiones y la necesidad de
reivindicar entre otras cosas una actualización acorde con la subida del coste
de la vida.
Lo dejo allí con su gente mientras me despide con la sonrisa
de satisfacción de un chiquillo que recibiera un regalo inesperado, yo a mi vez
le correspondo levantando el libro que ha dejado en mis manos, es una primera
edición con cubierta de piel ajada por el tiempo y en papel biblia: HISTORIA Y ANTOLOGIA DE LA POESIA
CASTELLANA. Gracias Pedro, espero que mi cuadro: LA ESPAÑA VACIADA llene tu
mirada, ¡cuídate! .
LOS AMIGOS NO SE ATESORAN, SE
PROYECTAN
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