SE ME HA MUERTO JUSTO GALLEGO

Este Quijote de magras carnes, bonete de lana churra, chambergo de granota y fajín de mariscal, de constitución enjuta, dientes en pandemia,  gestos de labriego y latines de cristiano viejo ha merecido la atención mundial dejando para la historia una impresionante catedral en la que ha empleado solamente material reciclado y desechos de obra. Nuestro justo y  hombre bueno por convicción, labrador por oficio y fraile de vocación fue defenestrado de su convento,  despojado de su hábito y estigmado por tuberculoso, algo que el superó entregándose en cuerpo y alma a una idea tan colosal como la del propio Gaudí y solo comparable a su proyecto de la Sagrada Familia.

No es mala coincidencia que Justo Gallego haya decidido dejar este mundo cuando Barcelona coronaba una de las torres de su basílica con la estrella más  extravagante y egolátrica que pueda imaginarse, algo que el propio Gaudí no hubiera consentido ni hubiera permitido tal despilfarro tanto de material como económico, teniendo en cuenta que al igual que nuestro amigo aprovechó siempre materiales reciclados y desechos de cerámica con los que consiguió ornamentaciones tan fantásticas como las de la fachada de su ahora basílica y el conocidísimo parque Güell.

La catedral de Justo gallego como la basílica de Gaudí ha quedado inconclusa, también como la de Gaudí  ni siquiera tenía  permiso de obras ni planos con los que proseguir su andadura , a Gallego solo un mozo que le ayudaba puede decirnos como seguir; pero escuchando a su maestro parece que su método era no tener ningún método, solamente intuición, mucho tesón,  y mucha paciencia, en el caso de la Sagrada familia un bosque de grúas está haciendo el descalabro, no querríamos lo mismo para la catedral de Mejorada del Campo, si pretendemos que el espíritu de Justo Gallego prevalezca solo el material reciclado tendría que seguir empleándose en sus paredes , en lugar de grúas sogas y carruchas y para las estrellas cristal recuperado y sobre todo saber disfrutar con la  calma que da el placer de ver crecer una gran obra nacida del reciclaje.

            A GAUDÍ HOY LE HAN PUESTO SU CORONA DE ESPINAS