UN CHEQUE DE AMISTAD

 Este año también me llegó su decimo de lotería, sinceramente no lo esperaba pensé que el fallecimiento de su esposa habría dejado en él un hueco que tardaría en superar, pero lejos de eso ha seguido siendo el amigo fiel a nuestra tradición,  un amigo del que ya  he hablado en este blog. No hace muchos días nos fundimos en un fuerte abrazo a propósito del fallecimiento de su esposa, hacía tiempo que no nos veíamos pero no habíamos perdido el contacto, me sorprendió su entereza y su forma de aceptar esta gran pérdida a la que él me decía había cuidado hasta el último día, pero tuve que apretar los dientes cuando me enteré de que para cuidar a su esposa se había hecho ingresar el también en la misma residencia, su argumento es que quiso seguir siendo su ángel custodio hasta el último día y dado que por su enfermedad degenerativa  podría encontrase sin un punto de referencia no dudó ni un momento en protegerla.

Mi amigo (Deri para los amigos) compañeros en el taller de pintura y sobre todo tertulianos a media mañana con un cafetito por medio me hizo entender en él lo que es el sentirse catalán sin renunciar de ser español. El evento de las olimpiadas se llevó por delante su industria de hilaturas y confección, me contaba resignado que la contrapartida económica no habíasido la deseada pero así y todo se mostraba tranquilo y conciliador aceptando con resignación su suerte por la transcendencia del evento.

Tengo varios cuadros firmados por él y algunos otros detalles que guardo en gran estima pero sobre todo lo tengo muy presente cuando alguien me interpela por el sentir (seni) catalán o la dignidad con la que él la hace suya,y yo pobre “charnego” siento no estar a su altura como castellano reclamando para mi tierra la contrapartida presupuestaria con la que entre otras cosas establecer comunicaciones rápidas, inversión sanitaria, implantación de industrias y el desarrollo de una vez por todas del puerto seco tan celebrado como inoperante y sobre todo esas ganas de luchar y de reivindicar hasta le extenuación por defender nuestras raíces sin caer en el victimismo y al igual que Extremadura no reclama el mismo trato para el castúo como para el catalán o el gallego en los foros internacionales me hace pensar en un complejo de inferioridad innato por el cual rechazamos un comportamiento contrario que nos incomoda.

LA POLITICA CONSTRUYE MUROS CON LA ARENA DEL VICTIMISMO