El negocio de las vísceras está en alza, destripada y aparcada por el momento la saga Cantora ahora la T.V. de los troleros ha decidido hacerse un lavado de cara haciendo olvidar que ella misma ha vivido y fomentado: la violencia, el machismo y el escándalo cruel y despiadado, la jugada les ha salido perfecta el mismo presidente del gobierno, varias de sus ministras y no pocas caras conocidas les ha faltado tiempo para salir a la palestra tomado parte del estrambote sin percatarse de que haciéndolo pasaban a formar del andamiaje de unos impresentables sin escrúpulos cuya única función es ganar dinero pasando por encima de valores y moralidades. Resulta que la televisión que no duda en alardear de presentadores, concursos y programas machistas ahora pone en escena con alardes de gran tragedia la vida y milagros de quien fue en otro momento demonizada como mala madre e hija caprichosa de la farándula y las revistas del corazón que se presta ahora a cambio de un buen puñado de Euros tratando hacer creíble una historia con una puesta en escena sobre actuada y desproporcionada.
Las
audiencias se han disparado, el precio por minuto de publicidad ha batido
records, el anuncio de nuevos episodios ha hecho olvidar por unos momentos el
tema de la pandemia y no pocos de nuestros políticos lo emplean en sus mítines
con intolerable cinismo cuando a menudo
en las sesiones parlamentarias tenemos que escuchar sus frases de desprecio y
despotismo hacia el otro sexo. España está enferma no solo del Covit está
enferma de valores, está enferma de criterios cuando hace de la televisión su
biblia e inviste a sus tertulianos como los predicadores de la honestidad y la
buenas costumbres teniendo como padre eterno a Paolo “Vacile” con su corte de paniaguados
a la voz de su amo y es tal la
desvergüenza de estos líderes de la moralidad que teniendo preparados los
capítulos de esta historia hace más de un año han estado cebando el anzuelo manteniendo
en su nomina y haciendo protagonista de sus intervenciones al que ahora
defenestra alardeando de no poder admitir en sus espacios a gente que como el
interfecto contraviene con sus formas y maneras la dignidad de la mujer.
España
necesita héroes y heroínas para hacer olvidar el trance por el que estamos
pasando, estos profesionales de las vísceras lo saben muy bien y saben también
las muchas horas que la televisión rellena los tiempos de enclaustramiento, manejan
y crean personajes para luego destriparlos sin pudor y sin conciencia aunque mantengan
entre sus tertulianos a declarados drogadictos o maltratadores profesionales, aquí vale todo si la audiencia es rentable,
la televisión se paga con la publicidad y lamentablemente el Sr. “Vacile” ha
roto el techo en esta audición. Ahora
hay que seguir ordeñando el impacto mediático recurriendo a las distintas sagas
que esperan su turno pasando eso si por previamente por taquilla.
EL
CIRCO DEL MAS DIFICIL TODABIA SOLO CAMBIA SUS PROTAGONISTAS
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